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lunes, 25 de noviembre de 2013

Tocar CADA DÍA

Cada día toco la guitarra, como quien reza, hace yoga, va al gimnasio. Es ya un ritual, y llega un momento... que es casi necesario. Como una droga, pero de las buenas.


Durante un tiempo toqué la guitarra sin tocar nada en concreto, simplemente para mí misma, como un medio de evadirme... un momento de meditación,  pasar los dedos por las cuerdas, encontrar por casualidad melodías aunque luego se me olviden ...  Esto puede parecer una pérdida de tiempo, pero no es así.
Ahora me he dado cuenta que también ha sido un ejercicio de conexión con mi guitarra. Un tiempo sagrado que yo he necesitado para luego desear avanzar más.

Pasé un tiempo así, sin hacer nada concreto, o tocando lo fácil con punteos pero luego quise hacer algo, y llega un día que nacen las  palabras y que la guitarra parece que hace su trabajo: añadir la melodía a esas palabras ... 
Tocar y cantar cada día, aunque sea un poco, me ayuda a no olvidar lo aprendido, a ganar confianza con mi voz y velocidad en mis dedos.
Hay días que no tengo ganas, la verdad, pero ese día... me animo y pienso:
"Aunque sea, voy a afinarla!" (hay que afinarla siempre, antes de tocar)
Y ya que está recien afinada pues ya me animo, aunque sea a repetir los acordes que sé, a intentar hacerlo cada vez más rápido... 

Hay personas que dicen: yo no tengo tiempo de tocar la guitarra!

Creo que el secreto está en no guardarla demasiado, cuando la pongo en su funda yo  no le cierro del todo la cremallera , no dejarla escondida en un armario, no colgarla muy alta en la pared , ni fuera de la vista.
Siempre tienen que estar cerca del  "músico", ella y el afinador. 











jueves, 21 de noviembre de 2013

NO !!! No sin mi GUITARRA!


Cuando empecé a tocar con mi guitarra Cuca,  empezó a crecer en mí un vínculo amistoso o de amor por ella. Incluso...llega un punto que pensé:  Sólo podré tocar con esta guitarra!?

El problema viene cuando estoy  lejos de ella, en otra ciudad, en casa de unos amigos y alguien saca una guitarra (recien afinada con un afinador complicado que yo no sé usar ) y la toca con soltura y me  la pasa... y....

HORROR!!!!! NO SUENA IGUAL QUE MI CUCA.

Canto con voz baja  la canción , intento acompañarme, y nada. No suena igual... !!!!
Y digo MUY ENFADADA:
-No, mira, no puedo tocar con esta guitarra... lo siento, me tendría que haber traido mi guitarra, bueno, el próximo día me la traigo!

Y el guitarrista me mira desconcertado y me pregunta:
-Qué harás si le pasa algo a la Cuca????

En ese momento... se me pasan mil cosas por la cabeza... mil respuestas, me salen chispas y truenos de la cabeza sólo de pensar que pudiera pasarle algo a mi guitarra.. y  ..... no pudiera conseguir acostumbrarme a otra guitarra!

Ya en casa...muy preocupada ... comencé a reflexionar...y.... se me ocurrió que quizás el problema no estuviera en la guitarra.

Entonces otro día cuando volví a casa de mis amigos no me llevé la guitarra pero días antes del viaje metí el afinador en el bolso para no olvidarlo.
En cuanto tuve oportunidad.... le pedí  al guitarrista que me pase la guitarra de aquel día... Le cambió un par de cuerdas que estaban mal, la afinó con su afinador y me la dió.
 Me la llevé a una habitación y la revisé con mi afinador (tengo uno muy sencillo y fácil de usar).
 Y........ ohhhhhh!!!!  en seguida la tengo afinada igual que mi guitarra Cuca.
Bien!!!!!!
Salí de la habitación ....
Y... ahora Sí.... a tocar mis canciones.... tan feliz!

POR FIN, adiós a los miedos de tocar con otra guitarra desconocida !
 Eso sí.... ahora digo:

NO, No sin mi afinador!!!!!









miércoles, 20 de noviembre de 2013

GUITARRA FÁCIL como por arte de MAGIA...



"es muy fácil, mujer! no ves? pero mírame! que soy tu profe!" "No te miro, así puedo imaginar que estoy con un Beatle "


 Aprender a tocar la guitarra es para muchas personas algo muy difícil y  complicado. Para mí, lo es.
Porque para aprender a tocar un instrumento, hacen falta una serie de cosas, que yo resumo en 3 básicas:

-Paciencia
-Constancia
-Memoria

 pues..... Yo no tengo nada de eso!

Entonces, lo peor que te puede pasar si eres igual que yo, es que vas a una academia o escuela de música, y comienzan a enseñarte ejercicios complicados que tienes que practicar, acordes que debes memorizar, y al final.... resulta que llevas meses estudiando en la academia de música y todavía no sabes tocar NADA!!!!

Los profesores de música tienen tan interiorizado su lenguaje que ellos mismos NO entienden por qué a los demás nos cuesta tanto comprender su idioma. 
Una parte de los alumnos que empiezan a tocar guitarra se aburren tanto, que terminan  dejando los estudios musicales, colgando la guitarra en la pared de la habitación (porque la verdad, queda muy bonita), o la venden, o la guardan en el trastero (por si alguna vez por arte de magia aprendo a tocar).

Cuando yo cogí la guitarra por primera vez en mis manos y sentí la emoción que produce el  pasar simplemente los dedos por las cuerdas, en mi cerebro se encendió un cartel luminoso con grandes letras que decía:

QUIERO APRENDER A TOCAR LA GUITARRA ... YA!

Para ello busqué por internet, y encontré un método (por punteo y sólo usando la cuerda 1 que es la más fina)  muy fácil, para lo que no hacía falta saber nada de solfeo, simplemente interpretar los números.
 Y como arte de magia ..... en pocos minutos ya estaba tocando la canción de "La cucaracha".
Esto es increíble, porque para una persona que jamás haya tocado la guitarra conseguir en pocos minutos tocar una canción conocida, es una ilusión muy grande y es lo que hace que quieras aprender más.

Durante dos años me he negado a estudiar los acordes, y eso que he conocido en este tiempo un par de personas que saben música y que han intentado enseñarme acordes sencillos, pero no lo han conseguido, yo seguía tocando la guitarra de manera improvisada y por oído. Pero eso sí, me guardé sus apuntes y hace unos días los he revisado y  empecé a practicarlos. 

He disfrutado mucho el tiempo en el que he tocado la guitarra sin preocuparme de técnica, ni de nada, pero al final, llega un momento... en el que si de verdad lo sientes, te emociona componer canciones, si amas la guitarra... QUIERES APRENDER BIEN y conocer los acordes. Yo ahora estoy en ello.

Incluso, ahora estoy arrepentida de no haber empezado hace tiempo a tocar bien con acordes, pues las canciones que he compuesto las he hecho con punteos fáciles. Y ahora me arrepiento!

También es cierto que yo necesitaba ver resultados inmediatos YA, por mi impaciencia. 
Y también necesité un tiempo de... tocar libremente mi guitarra, a solas,  sin la obligación de ir a una escuela de música,  de componer para mí misma, de divertirme con mi guitarra, de conocernos, de jugar, de llorar juntas, de empezar a inventar canciones  ... luego..... llega un momento de:
 VALE, ya nos hemos conocido un tiempo, pero ahora si de verdad nos amamos  .... Vamos a trabajar juntas en serio!



-Paciencia : hay que tenerla y no desesperar si duelen los dedos, o si suena fatal ,al principio es normal, todos los músicos han pasado por lo mismo!

-Constancia: un ratito cada día. Tocar la guitarra como algo cotidiano, aunque sean unos minutos. Es lo que hace que los dedos vayan cogiendo soltura.

-Memoria:  nos sorprenderá si cada día vamos tocando y recordando la posición de los dedos, como llega un momento que nuestra mala memoria.... MEJORA!

Consejo personal:  Enamorarse de un guitarrista ayuda mucho (a los que saben les gusta hacer de profesores) y si aún así no aprendes, pues que toque la guitarra y tú simplemente le escuchas!









lunes, 18 de noviembre de 2013

TOCAR DELANTE DE ALGUIEN






Tocar la guitarra delante de alguien de confianza es ya un gran paso para quienes estamos aprendiendo este arte.....  un familiar, un amigo, incluso delante de tu pareja!  y además... puede resultar hasta más complicado que delante de mucha gente o sobre un escenario.
La opinión de estas personas puede ser fulminante.
Estas personas son nuestra familia y por tanto nos aman, no quieren hacernos daño con una mala crítica y destrozar nuestra ilusión .....pero por otra parte.... tampoco quieren mentirnos y  que hagamos el rídiculo en internet , que la gente se ría de nosotros (y de ellos, por conocernos, je,ja,ja,ja....)

Ante todo debemos pedir SINCERIDAD..., pues... es eso lo que queremos, no? Bueno...  pero...de verdad... es eso lo que queremos????? (hay que estar muy seguro de que ya es el momento).

Aún así, antes es mejor anestesiar un poco a la víctima que va a escucharnos. Valen estas anestesias:

-Bueno, es la primera vez que toco la guitarra delante de alguien.
-Hoy la voz la tengo un poco mal. Tengo algo de resfriado.
-Normalmente, por la noche canto mejor poque la voz está más caliente.
-La canción que te voy a cantar está todavía sin terminar.
-Hace sólo unos meses que compongo mis propias canciones.
-Si me bebo dos cervezas entonces canto mejor.
-Cantar en otro idioma y dejar muy claro que... NO es mi idioma materno.

-........... (si se te ocurre alguna otra cosa... deja un comentario abajo, gracias!)

Mientras tocamos y cantamos...., una se pone muy nerviosa, qué horror....!!!!! te sale bien a solas, te sale bien cuando te grabas, y te sale fatal cuando tienes alguien delante!!!!!!

La primera vez que toqué (guitarra y voz) se podría decir que fue delante de mi hijo ensayando, y como suelen decir: Los niños dicen siempre la verdad.
Me decía: "dedicate a otra cosa, y dejame escuchar la tele... que estoy cansando del rin-rin-rin- de la guitarra!!!"
Tuve que encontrar momentos para ensayar cuando él no estuviese, entonces empecé a ensayar muchas horas cada día, y un día cuando hacía un tiempo que no me había escuchado, le canté una canción en catalán y le gustó tanto que me dijo:
-"Sabes? un día, cantarás en un escenario... y la gente llorará de emoción".

(qué FUERTE!!!, me dejó muerta su comentario!) A ver, ni yo misma me estaba planteando por entonces tocar música delante de nadie, sólo para mí, por entretenimiento...

La siguiente víctima fue mi pareja...  buffff, fue por el mes de marzo, y lo hice fatal. Qué nerviosa me pone! yo notaba que la guitarra me tapaba la voz... vamos, un desastre....!
Atención a sus comentarios: No se entiende lo que dices, la guitarra no la sabes tocar... etc... me dijo más cosas... días después... me dijo: "Dedicate a hacer canciones! bueno, sólo escribirlas!" ( significa: que la letra es buena, pero ni se me ocurra cantarlas ).

Unos meses más tarde, vuelvo a por él... como el que no quiere la cosa....con dos canciones nuevas dedicadas a él. Y ya le veo por la cara que pone, que la cosa va mejorando, pero cuando termino me dice que musicalmente he mejorado mucho pero que no está de acuerdo con la letra, con lo que dice la canción.
Y también me dice:
 NO te puedes poner tan nerviosa, qué harás cuando estés sobre un escenario?

(Ehhhhh???? qué ha dicho? sobre un escenario? eso significa que me ve posibilidades?)

Bueno, cuando las críticas empiezan a ser un poco más positivas, es lo que hace que nos anime a seguir practicando y mejorando...

El día que toqué delante de mi madre un par de canciones, bueno, a ella estas cosas no le van y no le gusta que su hija se dedique a "perder el tiempo en tonterías", pero aún así le gustó una de las canciones e incluso me aconsejó añadirle una frase que yo no estaba muy segura si quedaba bien.

La última víctima fue mi hermana.
Su opinión es importante para mí. Pero ella me daba largas desde hace tiempo.Ahora sé que tenía miedo a darme su valoración.
Bueno, le empecé cantando una, y al verle la cara, ya ví que le iba gustando. Entonces, seguí con otras y así, creo que le recité casi todo mi repertorio y algunas canciones sin terminar. Y me fue comentando de manera constructiva y muy alegremente las que más le gustaron.
Me dijo que estaba sorprendida, y que no se lo esperaba. Y que lo que debo mejorar es la guitarra, las melodías.
Y yo le contesto: "claro, estoy ahora estudiando los acordes, que hace muy poco que toco!"

La gente suele ser muy sincera, así, que debemos estar preparados para escuchar cualquier crítica. Incluso, sin que la digan directamente.
Existe el lenguaje indirecto:  Tocar una canción y que la persona luego no te pida otra, o bien como me pasó este verano, te comenten algo del estilo así como :
- "La que SÍ que canta bien es mi amiga Rita" (La tal Rita es cantante de gospel y practica canto desde hace muchos años, yo diría que más de 30 años y no se dedica a ello )
Ante estas críticas, una queda muy bien diciendo algo así como:

-Ya, ya lo sé que Rita canta divinamente , me han hablado mucho de ella. Pero comprende que ... yo soy cantautora desde hace sólo unos meses y .. lo que dices  es como comparar a los Estopa con Plácido Domingo.
 Ante una mala crítica o del estilo ese,  puede ser que no estamos ante el público correcto.(Es lo que debemos pensar para no hundirnos en la depresión, ni dejar colgada la guitarra en la pared como si fuera un adorno).

.....Bueno...por las caras que ponen, o si hablan de otra cosa, o se distraen con el móvil, o miran para otro lado...  Aunque no lo digan directamente, ya te están dando su opinión.

Malas opiniones o críticas, deben servir para mejorar lo que hacemos, no para dejar nuestra afición.
Hasta los peores y más raros artistas de dudoso talento tienen su público.
Mucha suerte para todas y todos!

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Animate , y escribe AQUI  abajo  tus comentarios sobre alguna de tus primeras experiencias tocando tu música delante de alguien. Me gustará leerte. Gracias!














domingo, 17 de noviembre de 2013

Mi primera GUITARRA


El día 30 de enero del 2010, en mi facebook personal publiqué : "Ahora tengo una guitarra".

Nunca estudié música, ni tenía idea.
Pero a finales del 2009 y a principios del 2010, se me pasó la idea de : "Por qué no comprarme una guitarra sencilla y empezar a aprender? "
Un día, justo después de las fiestas de Navidad, empezando el nuevo año.... estuve en la casa de la montaña que tienen mis padres y le dije a mi madre que me gustaría tener una guitarra.
Entonces ella me dijo:
_ Pero si aquí hay una !!!! que está guardada y olvidada....

Y entonces, me acordé de la historia de aquella guitarra.... hacía mucho tiempo....

Mi padre la trajo un día a casa, la rescató él cuando iban a sacar los escombros de una casa que habían derribado.
La guitarra estaba para la basura. No tenía cuerdas, estaba rota, la madera abierta....
Fue mi hermana pequeña que con cierta ilusión dijo que ella se la quedaba y que  le pondría las cuerdas y la arreglaría.
Sólo le puso la cuerdas. Y nunca sabré si intentó aprender a tocarla y si le dedicó algo de tiempo.
Mi madre me recordó que aquella olvidada guitarra estaba en aquella casa y que podía cogerla.
Recuerdo el instante que la tuve en mis manos....por primera vez...
Fue como coger a un bebé recien nacido...
Y pasé mis dedos por las cuerdas desafinadas... pero aquello sonó tan bien ... tan bonito... que me entraron  ganas de llorar de la emoción o algo parecido a un flechazo de amor.

Pasé al salón con "mi guitarra" en brazos con mucha ilusión, y ... MI PADRE.. qué cara puso...! decía que la guitarra era suya (como un niño pequeño y celoso ) y que no era para mí!  Mi madre decía que no, que la guitarra era de mi hermana que para eso le compró las cuerdas!
La escena era un poco cómica. Allí estábamos la familia discutiendo por una guitarra vieja que nadie sabía tocar.
Total, me llevé la guitarra a mi casa pero con la siguiente condición:

"Te llevas la guitarra, pero para la siguiente Navidad tienes que haber aprendido a tocar algo navideño... o tendrás que devolver la guitarra".

Cuando llegué a casa, me puse a buscar en internet alguna canción fácil para aprender a tocar pronto... y en una tarde aprendí a tocar "La Cucaracha". Yo misma no me lo podía ni creer!
Me grabé con el móvil y al día siguiente me encuentro a mi padre por la calle y le hago escuchar la canción...
buffff, se le saltaban las lágrimas.

Durante el año... estuve ensayando la canción "Noche de Paz".
Llegó la Navidad 2010, toqué la canción y mi familia dijo: "La guitarra es tuya".



Le puse cuerdas nuevas (aprendí a cambiarlas mirando vídeos de You tube).
Reparé sus grietas con masilla, hice algunas reparaciones más, y la decoré con unos brillantitos y una pegatina de una cucaracha, le puse un nombre: Cuca.
Y nos hicimos amigas.